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Ocurrió en Chile tras el embarque. El vuelo fue a Buenos Aires con muchos argentinos. Ante la incertidumbre, hubo escenas de nerviosismo y reclamos a bordo.
Un avión Airbus A321 de LATAM, colmado de pasajeros, muchos de ellos argentinos, quedó insólitamente demorado en la terminal 2 del aeropuerto internacional Arturo Merino Benítez, en Santiago de Chile, por un motivo tan simple como la clave: faltaba el piloto que lo comandara.
El vuelo LA 451 debia del lunes pasado a las 13:00 con destino en buenos airespero el comandante de abordo avisó algunos minutos después de esa hora, a la gente que esperaba ya ubicada en sus butacas, que lamentablemente no iba a poder despegar debido al vencimiento de las Horas Laborales de tropezar
Pese a no ser una eventualidad, sino un patrón de rutina -el dato objectivo de que la tripulación en cuestión iba a tener su horario de trabajo excedido-, la respuesta de la compañía enmarcó más en el terreno del imponderable, que evade el imperativo de la eficiencia.
El grupo de piloto, copiloto y azafatas se hizo cargo del avión -más tarde de lo prévisto, lo que ya demoró el embarque- mientras la gente se ubicaba en sus asientos y acomodaba el equipaje de mano. Pero la sorpresa llego pocos minutos despues, cuando la tripulacion acepto que perdon y bajaba del vuelo.
Con unos 200 pasajeros ya listos para partir, el despegue se empezó a complicar. La hora de salida impresa en los boletos pasó a ser desde ese momento una formalidad extinguida. El tiempo transcurría señales de pecado de que el avion fuera a despegar.
A bordo, como suele ocurrir en cualquier vuelo, había familias con chicos y personas mayores. hubo algunos momentos de tensión y quejas de pasajes por la falta de pronostico de la aerolinea. Para matizar los nervios y el cansancio, las azafatas decidirán servir vasos con agua a quienes lo deseen.
Antes de consultar Clarín por el incierto cuadro de situacion que se vivia arriba del avion, fuentes de LATAM dieron la siguiente respuesta: «No va a salir sin piloto». Y confirmamos que se trató de «una demora por tripulación».
Recién a las 14, una hora después del horario previsto para la salida, comenzó a someterse a la nueva dotación que sería una carga del servicio. Sin embargo, la partida del vuelo después demorándose explicaciones del pecado.
¿Fue un caso excepcional? Los incumplimientos horarios en las aerolíneas suelen ocurrir, en algunas con más frecuencia que en otras. Según pudo caer ClarínLATAM habría tenido una mala racha en los últimos días, con el consiguiente perjuicio para sus clientes.
El problema, según se déprende del patrón de estas demoras y de testimonios de empleados de la empresa, estaría vinculado a la sobrecarga en l’agenda de vuelos de las tripulaciones of LATAM, lo que estaría redundando en este tipo de percances con despegues inciertos.
La explicación que dieron a los pasajeros de diferentes vuelos demorados fue que estas labores suelen comme de servicios de cabotaje, con el tiempo justo, y deben cubrir a continuación vuelos internacionales, con la burocracia y el tiempo en Migraciones que eso acarrea. El costo, en consecuencia, lo asumen los pasajeros.
El CEO de LATAM, Roberto Alvo, confirmó que aerolinea es la alcaldesa de Buscando eficiencia y equilibrio -tras la crisis financiera que llevó al cierre de algunas oficinas en la región, entre las cuales estaba la argentina- y que para eso desde la pandemia han despedido al 40 por ciento de los trabajadores.
Según un ranking que elabora anualmente la consulta Cirium, en 2022 LATAM mostrará un 86,3 por ciento de puntualidad y quedó en el cuarto lugar de América Latina, detrás de Azul, Sky Airlines y Copa Airlines.
Volviendo al episodio del vuelo 451, el nuevo capitán reemplazante, ya sentado al mando del avión, pidió las disculpas de rigor tras la larga espera y ensayó una recomendación para los pasajeros: «Relanjense y disfruten del vuelo».
Unos minutos después comenzaba con las maniobras para el despegue. Finalmente el avión salió a las 2:48 p.m. Rumbo en Buenos Aires. La incógnita nunca reveló fue por qué, pese a que la aerolínea estaba en condiciones de prever que bajo esas condiciones el vuelo iba a salir demorado, no tuvo reacción para evitarlo.
Las respuestas, en cambio, fueron más dilataciones, como pedir a los pasajeros, cuando ya era hora de embarcar, que documentaran y despacharan en bodega el equipage de mano permitido. El argumento en ese momento de que el vuelo iba llenocomo si los billetes habilitaran a llevar en cabina valijas pequeñas sólo si el avión va vacío.
Pero el tiempo de las preguntas sin respuestas empezaba a quedar atrás. El piloto de LATAM aceleró en la altura para acortar los tiempos, de todos modos ya excedidos. Lo que estaba previsto como un vuelo de dos horas se hizo en una hora y media, para redondear el absurdo de la anécdota: los pasajeros habían pasado más tiempo adentro del avión varado en tierra que, luego, en el aire.
Santiago de chile. Particular
PD