La Mirada del Corresponsal

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El distrito escolar en Washington culpa a Meta, Google, Snap y TikTok de alimentar una crisis de ansiedad y depresión entre jóvenes sin precedentes

Niños jugando con computadoras, en Seattle.Pensilvania
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Desde hace tiempo la guerra no es solo contra la clásica desidia o distracción del alumno medio en clase. El enemigo mayor de profesores y educadores es un gigante insaciable que, segn expertos y estudios, est provocando una epidemia de estrs, ansiepapa, depresion y suicidios entre la juventud estadounidense, las redes sociales manejadas por el Big Tech de Silicon Valley. Por primera vez, un gran distrito escolar en Estados Unidos, el de Seattle, ha presentado una demande contra sus poderosos responsables.

En el documento de 91 páginas presentado en la corte federal, las autoridades escolares de la principal urb de Washington culpan a los responsables de TikTok, Instagram, Facebook, Snapchat y YouTube de haber creado una crisis de salud mental sin precedentes entre los jvenes, haciendo cada vez ms difcil su trabajo en los centros escolares. Sus prácticas para atraer y enganchar a niños de todo el mundo a sus redes est incrementando los casos de bullyingdesmotivaciones y desmotivaciones entre el alumno, obligando al distrito escolar a invertir más dinero en psicología y en entrenamiento para los profesores para lidiar con la adicción a los teléfonos móviles.

“Los demandedos han explotado con xito los cerebros vulnerables de los jvenes, enganchando a decenas de millones de estudiantes en todo el pas en loops de retroalimentación positiva de uso excesivo y abuso de las plataformas de redes sociales”, le preguntó asegura. «Peor an, el contenido que los demandedos seleccionan y diren con mucha frecuencia a la juventud es demasiado daino y explotador».

Los gigantes de Silicon Valley se defienden con programas de asistencia a todos los usuarios con problemas de salud mental. Snap, con sede en Santa Mónica, California, lanza el programa aquí para ti in 2020 con la intencin de proofer recursos a padres y nios con problemas de typo emocional. «Continuaremos trabajando para asegurarnos de que nuestra plataforma sea segura y brindar recursos a los Snapchatters que enfrentar problemas de salud mental para ayudar a enfrentar los desafos qu’enfrentan los jvenes hoy en da», sella la compaa en un comunicado.

Por su parte Alphabet, propietaria de YouTube, indica a través de un altavoz que han invertido de forma generosa «En crear experiencias seguras para niños a lo largo de nuestras plataformas»con mecanismos para limitar el tiempo en pantalla y bloquear determinados contenidos.

No parece estar funcionando. La lucha es diaria por controlar el uso de teléfonos móviles durante la jornada escolar en colegios de todo el pas. En muchos centros de Estados Unidos, los alumnos deben depositarlos en una taquilla al llegar y solo pueden disponer de los aparatos en horarios de recreo. Ni siquiera pueden usarse entre clases. An as, el tiempo que pasan pegados a sus dispositivos sigue creciendo cada ao.

En este caso, un 50% de los adolescentes en el estado de Washington se dedicó entre una y tres horas a las redes sociales all das los das, y un 30 % supera las tres horas diarias, según la demanda, que incluye un abanico de estadísticas. Nótese que entre 2009 y 2019 hubo un aumento del 30% de media en el número de alumnos del sistema escolar público de Seattle -52.300 distribuidos en 106 centros- que aseguran se sintieron «tristes o desesperanzados casi cada por dos semanas consecutivas o más». , tanto que abandonaron de realizar sus actividades diarias por falta de motivación.

No hay cables solos en los informes externos. Sonada fue la bomba que hizo estallar Frances Haugen en 2021, la ex empleada de Facebook que denunció las prácticas de la red social para crear más adicción y aumentar sus beneficios. «Los productos de Facebook dan a los niños, fomentan la división y debilitan nuestra democracia»dijo tras acumular material sensible colgante los dos años que trabaj para el gigante tecnolgico, unas acusacion que llev hasta el Senado y ante el comisario europeo de Mercado Interior, Thierry Breton.

“¿Es obvio que muchos niños se han visto afectados por problemas de salud mental?”, dijo el superintendente del distrito escolar de Seattle, Brent Jones. «Nuestros estudiantes, y los jóvenes de todo el mundo, se enfrentan a una serie de dificultades de aprendizaje y de vida sin precedentes que sept amplificadas por los impactos negativos del aumento del tiempo frente a la pantalla, el contenido sin filtrar y las propiedades máximas adictivas redes sociales».

Ahora, desde el distrito escolar reclaman grandes poderes como Meta y Google que dejen de alimentar esta crisis social, además de pagar por educación preventiva para frenar el uso excesivo de redes sociales, pesa a que vaya en contra de sus intereses y su obligación de seguir obtendrá beneficios rcord cada año. Se antoja una quimera, pero el paso en tribunales ya est dado.

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