Concierto de Ao Nuevo: Welser-Mst, sonra por favor

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El director austriaco sorprende con un programa cargado de estrenos pero exhibe su faceta menos festival en la 83 edicin de la matin sinfnica

Welser-Mst dirige la Filarmónica de Viena con su tradicional Concierto de Año Nuevo.Filarmónica de VienaCEPE

volcan se haba Franz Welser-Mst en los preparativos de su tercera intervención como medio de la Filarmnica de Viena durante el concierto de mayor audiencia del mundo. Quera el maestro austriaco evitar toda costa el ya visto gato con un programa que reivindicaba la figura de Josef Strauss (por encima de la de su padre Johann) y que incluía nada menos que 14 obras (de un total de 15, sin contar las tres propinas) nunca antes escuchadas en la matin sinfnica del Musikverein. Pero ya se sabe que las tradiciones mejor arraigadas no presentaron reformulación y el Concierto de Ao Nuevo, a pesar de los esfuerzos de Welser-Mst, no slo cumpli con el guion de los bostezos, sino que se ci escrupulosamente a los peores presagios.

Le precede a Welser-Mst cierta fama de director aburrido, sobre todo si nos atenemos a sus dos anteriores comparecencias de Ao Nuevo en la Sala Dorada (en 2011 y 2013), muy alejadas de la vitalidad festiva que cabe esperar del repertorio bailable de la familia Strauss y que l se empea en abordar desde el rigor y la asepsia musicolgicasin apenas concesiones al humor, a la diversin ni mucho menos al desenfreno con que fueron concebidas algunas de estas piezas, en que se describe los nervios de las parejas en las pistas de baile de un parque de atracciones, con tiernas alusiones al fervor carnal de los adolescentes de la poca, y que incluso recrean escenas de borrachos caminando por las calles de Viena tras una noche de juerga.

No se trataron de convertir la polca rapida Frisch heran! (venid con alegra!) de Johann Hijo en un trasunto sinfónico del reguetón que venan de bailar algunos de los más fieles y resacosos telespectadores. Le habra bastado a Welser-Mst con sonrer mientras marcaba, con su impoluto chaleco gris, las entradas de los msicos de cada seccin. Le pueden los nervios (no es fácil empuar la batuta ante una audiencia planetaria que ronda los 50 millones de espectadores), pero también un exceso de devoción por un repertorio que conoce mejor que nadie (se jacta de custodio en la biblioteca de su casa más de 7.000 partituras con todos los valses y polcas de la dinasta Strauss) y que, quiz por eso, no debera dirigir tan en serio.

Lo tendrn fcil los muchos detractores de Welser-Mst, al que han acuado el sobrenombre de Francamente peor que la mayoría (francamente, peor que la mayora) obviando los muchos mritos que apuntalan la carrera del director de Linz, incluido el de han reducido considerablemente la edad media de los abonados de la Orquesta de Cleveland (de la que es titular desde hace aus 20) con sesiones escolares por todos los colegios de Ohio. Por eso, porque ya nadie duda de que dirigir es mucho más que saber leer partituras, sorprendido de que Welser-Mst insistiera en resultar tan poco comunicativo, y hasta pacato en su expresión corporal, convencido como est de que sus compromisos se circunscriben a las horas de ensayo, cuando el público no le ve.

Debemos agradecerle, eso s, que incluirá en el programa pasajes sinfónicos de gran calidad no especificadoscomo la deliciosa seccion de cuerdas del vals Heldengedichte (poemas heroicos) de Josef Strauss, la fantástica introducción de En lauschiger Nacht (En una noche acogedora) de Carl Michael Ziehrer o la sorprendente intervención del fagot en la obertura de Isabela, opereta de Franz von Supp que Welser-Mst le regal a su sobrina del mismo número (no fue la nica dedicatoria personal: la misteriosa Anglica de la polca francesa de Josef Strauss tena a su mujer como principal destinataria). Other de las grandes novedades del Concierto de Ao Nuevo fue la presencia, por primera vez en la historia, del Coro de Nias de Viena, fundado en 2004.

For lo dems, no hubo contratiempos en la escalata del Concierto de Ao Nuevo, que en su edición 83 contaba con un protocolo de actuación en el improbable caso de que alguno de los valses fuera interrumpido por activistas climáticos. La primera de las tres propinas (la secreta) corri por cuenta de Johann Strauss hijo y llevaba por ttuloEl galope de los bandidos. Luego, como mandan los cnones, el público interrumpi el comienzo de el bello danubio azul para que Welser-Mst tomara la palabra en un breve discurso (nada que ver con el de Riccardo Muti en 2021) y parafraseara a Nietzsche (la vida sin msica sera un error) antes de dar paso a la ms enrgica felicitacin del ao por parte de los msicos de l’orquesta: Prosit Neujahr!.

Despus Welser-Mst dirigió el palmeo acompañado del público colgante una triunfal Marcha Radetsky, que por cuarto ao consecutivo volvi a sous à los atriles en el arreglo firmado al alimn por los miembros de la Filarmnica de Viena en substituted de la ms soldadesca y polmica versin del composer y miembro del partido nazi Leopold Weninger. La gran noticia que muchos esperaban no se produjo: el nombramiento de la primera directora en hacerse cargo del Concierto de Ao Nuevo (con candidatas como Joana Mallwitz, Oksana Lyniv o la todopoderosa Mirga Grainyt-Tyla) tienden que esperar, por lo menos, hasta 2025. Mientras el público se deleitaba en el balneario auditivo de las acuarelas por Joseph Strauss, la Filarmónica de Viena envió un comunicado en el que anunciaba al sucesor de Welser-Mst: ser el maestro alemán de 63 años Christian Thielemann, quien asumió la responsabilidad allí en 2019.

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